La Empresa Nacional del Petróleo (Enap) y Lipigas firmaron un acuerdo para liderar la producción de combustibles de bajas emisiones en Chile, utilizando residuos orgánicos en las plantas de refinación de la estatal.
Este acuerdo representa un paso clave hacia la transición energética, contribuyendo a la reducción de la huella de carbono en sectores como la industria, el transporte y los hogares.
Un hito inicial de esta alianza fue la fabricación de diésel renovable en la Refinería Aconcagua, donde en julio se procesaron más de 350.000 litros de aceite de cocina reciclado, logrando reducir 1.131 toneladas de emisiones de CO2 frente al diésel convencional. Este proceso ha sido validado por una certificadora independiente, permitiendo a Enap proyectar su ingreso al mercado nacional con este producto.
Además, se espera que el gas licuado renovable esté disponible a partir de 2025, consolidando el compromiso de ambas empresas con las energías limpias. Como parte de esta iniciativa, Enap ya vendió a Lipigas un lote inicial de diésel renovable, que próximamente llegará a los consumidores finales.
Este esfuerzo forma parte de la estrategia 2040 de Enap, que busca posicionarla como un actor clave en la transición energética, mientras Lipigas avanza hacia la sostenibilidad en el sector del gas.
Declaraciones de líderes de Enap
Gloria Maldonado, presidenta del directorio de Enap, subrayó: “La elaboración de combustibles bajos en carbono forma parte esencial de nuestro Plan Estratégico Enap 2040, cuyo objetivo es convertirnos en un actor clave para la transición energética de Chile, poniendo a disposición de las personas combustibles con menor impacto medioambiental”.
Por su parte, Ángel Mafucci, gerente general de LipiAndes, comentó: “Nuestro compromiso es desarrollar una oferta de energía renovable en Chile y América Latina, donde vemos grandes oportunidades de crecimiento y la posibilidad de dar acceso de manera masiva a energía limpia a millones de personas. Avanzar en este sentido a través de esta alianza con Enap es un paso muy relevante en la industria”
Esta colaboración refuerza los compromisos de descarbonización asumidos por Chile, alineándose con la demanda global de alternativas energéticas más responsables con el medio ambiente.
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