El caso de Luigi Mangione, el joven acusado de asesinar al CEO de UnitedHealthcare, Brian Thompson, ha desatado un apoyo inesperado que ha captado la atención de la opinión pública. A pesar de que el asesinato en cuestión ha sido ampliamente condenado, un sector de la sociedad estadounidense ha mostrado simpatía por Mangione, viéndolo como una figura que desafiaba al sistema de salud del país.
En diversas redes sociales y foros en línea, algunos usuarios lo consideran un símbolo de resistencia contra las grandes corporaciones de seguros, especialmente aquellas como UnitedHealthcare, a las que critican por poner las ganancias por encima de la salud de los ciudadanos.

Este apoyo, aunque limitado, se ha materializado en campañas como la de GiveSendGo, una plataforma de recaudación de fondos vinculada a causas controvertidas. En su página, se han recaudado miles de dólares para defender a Mangione, a pesar de la gravedad de los cargos que enfrenta. La cifra sigue en aumento, lo que refleja el nivel de respaldo que ha encontrado en una parte de la población que se identifica con su protesta contra el sistema de salud. Los defensores del acusado argumentan que el crimen de Mangione es una manifestación extrema de la frustración acumulada por el trato recibido por las aseguradoras de salud.
Un factor que ha influido en el apoyo recibido por Mangione es su apariencia física. Con una figura atlética, buena presencia y una imagen atractiva, el joven ha logrado captar la atención de los usuarios en las redes sociales. Muchas personas, en particular en plataformas como Instagram y Twitter, han destacado su belleza y carisma, lo que ha generado una base de apoyo emocional entre sus seguidores. A menudo, en estos espacios, los seguidores tienden a enfocarse más en su apariencia que en los hechos que lo acusan, lo que ha llevado a algunos a verlo como una víctima o héroe de su propia causa.
La indignación por el sistema de salud detrás del apoyo a Luigi Mangione
La figura de Luigi Mangione ha sido interpretada, por algunos, como una especie de “héroe” que se levantó contra lo que él consideraba un sistema de salud roto. En su manifiesto, que dejó escrito antes de cometer el asesinato, Mangione expresaba un fuerte rechazo hacia las aseguradoras de salud como UnitedHealthcare, a las que acusaba de ser “parásitos” que se enriquecen a costa del sufrimiento de los ciudadanos. Aunque este apoyo a Mangione no es mayoritario, ha generado controversia, reflejando la creciente frustración que muchos sienten hacia las grandes corporaciones del sector.
Este respaldo ha desatado debates sobre las profundas desigualdades dentro del sistema sanitario estadounidense, donde las aseguradoras privadas parecen ser las grandes beneficiarias, mientras que la ciudadanía enfrenta serias dificultades para acceder a la atención médica adecuada. En este contexto, el caso de Mangione ha abierto una conversación sobre la necesidad de una reforma en el sistema de salud y la creciente desconfianza hacia las grandes empresas de seguros.
La intensa búsqueda de Luigi Mangione por su familia
Antes de que las autoridades comenzaran su búsqueda activa, la familia de Luigi Mangione ya estaba en alerta por su desaparición. La madre de Mangione, Kathy, había estado buscando a su hijo durante meses. En noviembre de 2023, preocupada por su paradero, incluso presentó una denuncia ante el Departamento de Policía de San Francisco por la desaparición de Luigi, quien se había alejado de las redes sociales y no se comunicaba con nadie. La familia, muy unida, temía por su bienestar, pero no tenían idea de que Luigi había estado planeando un crimen de tal magnitud.
Antecedentes del asesinato de Brian Thompson

El asesinato de Brian Thompson, CEO de UnitedHealthcare, ocurrió el 4 de diciembre de 2024, en el vestíbulo de un hotel Hilton en Manhattan, Nueva York. Thompson fue atacado a las 6:45 a.m. por un hombre enmascarado que le disparó varias veces con una pistola equipada con un silenciador. Tras el ataque, el agresor huyó a bordo de una bicicleta, dejando atrás las pertenencias de la víctima. La policía encontró evidencia clave en la escena del crimen, incluidos casquillos de bala y un teléfono celular, que ayudaron en la investigación.
La búsqueda de Mangione comenzó inmediatamente después del asesinato, y la policía lanzó una campaña para identificar al sospechoso. Fue finalmente un empleado de un McDonald’s en Pensilvania quien lo reconoció gracias a las imágenes difundidas por la policía. Durante su arresto, Mangione fue encontrado con una pistola fantasma, un silenciador, documentos falsos y tres hojas con su manifiesto, en el que explicaba sus razones detrás del ataque.
Mangione fue detenido en Pensilvania y está siendo procesado por el asesinato de Thompson, así como por otros delitos relacionados con armas y documentos falsificados.
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