Un atropello múltiple ocurrido en los aledaños del RCDE Stadium ha marcado el inicio del derbi catalán entre el Espanyol y el FC Barcelona este jueves. El incidente dejó al menos 13 personas heridas, aunque ninguna de gravedad, según informaron fuentes policiales. El suceso generó momentos de pánico y tensión entre los asistentes al evento deportivo.

El atropello múltiple ocurrió minutos antes del inicio del partido
El incidente tuvo lugar poco antes del arranque del partido, cuando una mujer al volante de un Peugeot blanco perdió el control de su vehículo. Según los Mossos d’Esquadra, la conductora entró en pánico tras ser víctima del lanzamiento de objetos por parte de algunos aficionados del Espanyol. Al intentar huir de la situación, aceleró de forma súbita y terminó embistiendo a un grupo de personas que se encontraban en los alrededores del estadio.
La mayoría de los heridos fueron atendidos en el lugar por los servicios de emergencia. Aunque algunos necesitaron ser trasladados a un centro ambulatorio para revisar posibles lesiones, la policía ha confirmado que no hay víctimas graves. El accidente se está tratando como un atropello múltiple accidental, y las autoridades aseguran que la situación está controlada.
El suceso generó tensión dentro y fuera del estadio
La megafonía del RCDE Stadium informó a los presentes sobre lo ocurrido, lo que generó protestas por parte de algunos sectores de la afición local. Se pidió detener el partido, lo que llevó al árbitro, Soto Grado, a acercarse a la banda para informarse sobre la situación. Sin embargo, tras una breve interrupción, el encuentro se reanudó.
La tensión no solo se vivió en las calles adyacentes al estadio, sino también en redes sociales. Testigos del suceso compartieron imágenes y videos del momento exacto del atropello. En las grabaciones se puede observar cómo el vehículo, aparentemente atrapado entre unos contenedores, acelera de forma repentina hacia un grupo de personas.
Un accidente que pudo ser tragedia
El atropello múltiple ha provocado una fuerte conmoción, especialmente por el contexto en el que ocurrió: un evento deportivo de alto perfil, con decenas de miles de personas reunidas en torno al estadio. Los aficionados del Espanyol se encontraban en el lugar para recibir al autobús de su equipo, una tradición habitual en partidos importantes.
A pesar del susto, las autoridades insisten en que no existe riesgo para las personas dentro del recinto deportivo. «La situación está controlada», reiteraron los Mossos, quienes continúan investigando los detalles del incidente.
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